viernes, 21 de junio de 2013

Reflexión

Desde que me mantengo alejado del consumo de drogas son muchas las preguntas que pasan por mi cabeza, ¿ no ve la gente lo qué hace?, ¿ por qué dicen sí a lo que deberían decir no? ¿ por qué poner más peso a esa piedra que llevamos encadenada al pie, esa piedra que a veces la vida nos pone en el camino? ¿ por qué caer en una enfermedad como es la ADICCIÓN , cuando hay personas que pasan por enfermedades terminales sin haber sido elegidas por ellos?

Esas y otras más preguntas son las que muchos días de mi vida me pasan por la cabeza, quizás las respuestas a muchas las tenga pero a otras no.

 

Otras personas al igual que yo, elegimos ese camino para parecer más guays , más malotes y al final acabas siendo un idiota y encima enfermo para siempre , porque  el ser adicto es para siempre.

Tengo que decir que cuando yo era pequeño la gente de la calle me daba miedo , mis padres me explicaban porque esa gente estaban así y yo siempre decía “ Yo nunca acabaré así , jamás”

A muchos seguro que le a pasado lo mismo, lo que yo pensé entonces , y seguramente la primera vez que se metieron una raya no les vino la imagen de esa gente a la cabeza.

 

Pocos somos los que tocamos fondo y volvemos a nacer y a pesar de haber salido debemos luchar toda la vida contra esta enfermedad que es la adicción. Cuando sales de todo eso empiezas a valorar cosas de tu vida que antes no les dabas importancia y te apena cuando ves a gente que sigue cayendo en las drogas. 

Por eso yo cuento mi historia porque me gustaría que la gente que lo leyera tomara conciencia de cómo puedes acabar si caes en el infierno de las drogas , y si contando mi historia ayudo a otras personas a tomar conciencia pues estaré muy satisfecho de haberlo hecho.

 

Con todo esto quiero decir que si aún no has entrado en ello no entres y si lo has hecho y quieres salir se puede salir de ello , pero hay que luchar mucho.

 

Desde que salí de ese infierno estoy mucho mejor con mi familia , mis amigos y sobretodo y más importante conmigo mismo.

 

El mensaje que quiero dar es muy claro,

 

LA DROGA MATA

 

 

 

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